domingo, 23 de diciembre de 2007

Carta de despedida leída en el último programa 2007 (comienzo de la gestión Pro)


Hace varios años fuimos regando nuestra rosa. La sembramos en el aire de la Radio Ciudad. La plantamos en los agujeros de la media. La regamos en los baches de La Porteña. La cuidamos, como si fuera la única rosa florecida en un planeta extraño, en nuestro único planeta, pequeño y contaminado. Fuimos responsables de la rosa... la cultivamos en julio como en enero. Vimos abrir sus pétalos blancos, amarillos, rojos. La vimos florecer. Nos asombramos con cada una de sus espinas. Nos deslumbramos con sus pétalos. Nos divertimos mucho creciendo con la Rosa. Nos encontramos en el aire con ustedes, con ustedes multiplicamos las maneras de nombrar, las maneras de brindar la rosa. Nos multiplicamos en voces, en música, en poesía, en gritos, en rabia, en esperanzas, en ternura. El tiempo que vivimos y sentimos el aroma de la rosa en el aire de la ciudad, fue el tiempo de los intentos.
Cuando la tierra se cierra en nuestras raíces, levantamos vuelo. Seguiremos sembrando rosas en el aire, allá donde la palabra se vuelva rebeldía. Seguiremos multiplicando causas y azahares... Seguiremos despetalando amores en el corazón del pueblo. Resisto. Mucho Poquito Nada Muchito Alguito más. Me solidarizo. Mucho Poquito Un poco más.
Seguiremos brindando por cada alegría de los nadies. Seguiremos doliendo cada injusticia. Seguiremos recuperando memoria brindada, historias blindadas. Seguiremos inaugurando pasiones no contaminadas. Seguiremos naciendo jardines en los que la diversidad, sea la única norma.
La rosa brindada. El mundo en Buenos Aires. La rebelión de la Rosa que se pulveriza frente a nuestra mirada. La poesía que desconfía de las programaciones. Los cantos y los bailes que se fugan de la Radio Ciudad. Los
que vuelven a las calles para hacer sus malabares. Los que ensayan en las esquinas inaugurar un nuevo baile.
La Rosa brindada que se escapa de nosotras mismas, que se calla, que se despide, que inicia otra retirada… para renacer en carnaval.
¿Nos vamos? ¿Nos volvemos? ¿Nos brindamos? ¿Nos blindamos? ¿Nos caemos? ¿Nos levantamos? ¿Nos lloramos? ¿Nos reímos a carcajadas de la mediocridad institucional? ¿Nos sonreímos con ternura de nuestros desamparos? ¿Nos enojamos con los dioses del olimpo?
¿Organizamos excursiones al CEAMSE para descubrir que ahí no está toda la basura, que también hay mucha más acá, más cerquita, en el mismísimo microcentro?
¿Hacemos un acto de fe, y descreemos del poder? ¿Creemos que elegimos en las últimas elecciones? ¿Nos reímos de lo que creemos? ¿Recreamos algo que no sea recrear? ¿Brincamos la rosa? ¿Tomamos por asalto el rosal?
La Rosa brindada. Una piedra en el zapato del poder… lanzada al aire de la ciudad, este 21 de diciembre.

Los voy a extrañar, las voy a extrañar, voy a extrañar este cachito de vida que vivimos juntoas desde hace tres años…
Ustedes saben, qué bueno!, -porque me lo devuelven en cartas y en laaaaargos adioses que son como abrazos-, que le puse empeño a nuestros encuentros, que vine con alegría cada día que vine, y que cuando andaba mufada, en cuanto nos poníamos a charlar, cada cual en alguna orilla del aire, la cosa se volvía mariposa, solcito en el horizonte, luna llena…

Estuvo buenísimo Roberto López que hayamos traído a la luz a grandes poetas con la excusa de algún aniversario, volví a leer a algunoas, conocí otroas, nos detuvimos en aquellos que más nos gustaban, Fernando Pessoa, Borges, Cernuda, Guillén, Machado, Sor Juana, Diana Bellessi, Alejandra Pizarnik, Olga Orozco, Gioconda Belli…
Estuvo buenísimo también que Adriana Schottlender y Bárbara Ramirez Araujo se engancharan con la propuesta y cada día garantizaran la presencia de un artista, Adriana aportando, además, diferentes miradas sobre el cine.
Y más bueno aún que compañeras de vida y de camino, amiguitos entrañables, me dieran el sí en esta aventura de compartir el aire y la palabra, Alejandra Aristegui, un pétalo pa’ti, hermana querida, teatrera/teatrista/actriz, directora, Dianita Tarnofky, otra cuota de magia para la radio, un pétalo de belleza y alegría, experimentando soniditos, tan propios de este medio y sin embargo tan poco frecuentados, Daniel Heffes, amigo entrañable, coleccionista de buenas músicas, conocedor de historias, sanador tranquilo, soñador gozoso, haciendo muchos kilómetros cada viernes que vino a visitarnos, con sus discos, con su buena disposición a la charlita amena y el encuentro. Ricardo Zuvilivia que apuntó su antena al mundo y nos hizo conocer otras músicas, nos dio de beber de otras fuentes, siempre buscando el origen. Luciana Peker, Radio Ciudad nos juntó y potenció en nuestras certezas acerca de la lucha por los derechos de las mujeres y el ejercicio del periodismo en libertad, encontré en ella una gran colaboradora, lúcida, preocupada, informada, activa, aprendí de ella y me llevo una amiga. Claudia Korol, compañera entrañable de aventuras radiales y proyectos de vida. Una de las imprescindibles, con su caleidoscopio de rebeldías, guevariante educadora popular, preocupada por las libertades de hombres y mujeres y travestis y transgéneros, ocupada en la lucha contra las injusticias.
De todas y de todos he aprendido algo y me voy enriquecida.
Gracias Alberto Burgos, que nos aportó su conocimiento sobre la música celta y otras de por allá del norte de Europa, gracias Mariela Velardez, Gimena García Blanco, Paula Lorenzo, Celeste Justel, Pedro, Daniel, Estela, Walter, Gonzalo, Sergio, Santiago, Romina, Pupi, Ariel, Martín, Lechu, Turca, Marciante, Pablo y a todoas aquellos que no nombro pero que están en mi corazón.

También a ustedes, jardineros y jardineras de esta rosa, amiguitas y amiguitos del aire…como dice el poeta “cada vez que algo se nos muere nace un poco más allá..”.
Éste es mi deseo para el 2008: Que perdure el amor, y si un amor muere, que sea para que otro nazca más allá.
¡¡¡Rebeldía, Resistencia y Efervescencia!!!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones por tú trabajo Liliana...los amores se fortalecen en el tiempo cuando son de corazón,y así, suena tú trabajo... por lo que con ansiedad esperamos un pronto nacimiento.
Un abrazo solidario.
Daniela Andrade Zubia
www.laciudaddelasdiosas.blogspot.com

Brindar la rosa
en el tiempo y el espacio mágico del aire radial.
Radializarla. Irradiarla.
Regarla con la poesía, la música, los dolores
y la esperanza que guarda la tierra.
Rehacer la rosa pétalo a pétalo,
Me quiere mucho,
muchito y todo.
Blindarla en el combate. Brindarla en el amor.
Risarla con alegre rebeldía.
La rosa brindada. Espacio de los intentos.


La rosa brindada

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